Más de medio centenar de personas han sido detenidas en Hong Kong en las últimas semanas en diversas manifestaciones que enfrentan a jóvenes locales con los turistas chinos que inundan la ciudad a diario para comprar diferentes productos. Aunque ayer no fue uno de los días más duros, ya que tan solo hubo 4 detenidos, sí que se vivieron escenas de mucha tensión entre aquellos que demandan que sus compatriotas de la parte continental tengan mayores restricciones a la hora de pisar esta región especial y los chinos que vienen a comprar enseres que en su territorio no consideran seguros.
La manifestación de ayer, que no estaba autorizada, no llegó a congregar a tantos seguidores como en otras ocasiones, lo que provocó que jugaran al gato y al ratón con la policía desplazándose de un barrio a otro y se produjeran altercados en Sheung Shui, Tuen Mun y Tsim Tsa Tsui. Y es que desde que se desocuparan las calles de la ciudad tras la «revolución de los paraguas» muchos hongkoneses están tratando de que a sus vecinos les sea difícil pisar esta parte del país.
Sin embargo, Pekín ha insistido en que no tolerará comportamientos independentistas que amplíen la fina línea que separa ambas partes de un mismo país. Según dijo el pasado sábado Zhang Xiaoming, responsable del departamento del gobierno central encargado de los asuntos de Hong Kong, de aquellos que cruzan la frontera para comprar productos y revenderlos en otras ciudades, «el 40% son de la China continental y el 60% de Hong Kong».
En los incidentes de ayer, varios de los comercios tuvieron que echar la persiana al paso de los vociferantes manifestantes, quienes de malas maneras tiraron la mercancía que estaba expuesta a sus puertas. Además, hubo varias escaramuzas entre los exaltados y compradores que portaban pañales o leche en polvo entre otros artículos.
Pero las protestas no se centran únicamente en la suciedad generada por los compradores en estos barrios o de que los alquileres hayan subido. Algunos hongkoneses van más allá y no quieren compartir su tierra porque piensan que ser parte de China les desprestigia. Sin embargo, no todos son de la misma opinión y como ayer decía el taxista hongkonés Chau Yuk Tong, «¿Por qué no pueden entrar aquí, no vamos nosotros a China también? Todos somos chinos» .
Una idea sobre “Medio centenar de detenidos en diversos enfrentamientos en Hong Kong”
Un pequeño apunte!
Antes de que Toriyama se inspirase en la novela china, el personaje de Sun Wukung a su vez ya estaba inspirado en Sugrīva, el Rey Mono, y su sabio consejero Hanuman, que acompañan al príncipe Rama durante sus aventuras en el Ramayana, una obra épica India cuya datación se sitúa entre los siglos VI y III a.d.C.